miércoles, 8 de junio de 2011

Mi mail a Cavallo cuando tenía 17 años



Siempre me interesó profundizar a medida que descubría nuevos espacios de conocimiento.  Hoy en día creo que esa virtud se diluyó con el paso del tiempo, al punto que, ya no tengo esa curiosidad por las cosas como cuando era más chico y todavía estaba en la secundaria.

En ese entonces, recién comenzaba a descubrir la economía, me había orientado para ese lado en el polimodal.  Siempre que los temas tenían una verdad pura y única estaba todo bien. Lo que me intranquilizaba era cuando había dos bibliotecas para un tema en particular.  Es decir, dos visiones opuestas para una misma problemática, y que ambas pudieran ser correctas.  Era algo que no lograba entender, no me entraba en la cabeza.  Peor aún cuando dicho tema estaba tan latente en la sociedad.

Los modelos son dos, y están claramente definidos.  Por un lado, una economía con mayor flexibilidad a las inversiones, ausencia de Estado y un mercado con libertad, algo similar a lo que se llamó neoliberalismo en Argentina.  Por el otro lado, un modelo con intervencion estatal, desarrollo del mercado interno, y proteccionismo.  Este último punto (el de proteccionismo si, proteccionismo no) se centraría el intercambio de mails con el que yo creía que era el principal representante de uno de los dos modelos, y que creía que podía despejar algunos de mis interrogantes.

Cuando escuchamos nombrar a Cavallo, enseguida nos acordamos de la peor crisis económica del país, el corralito y todo lo que vino después.  Su imagen es altamente negativa y eso lo tenía bastante asimilado.

Demás está aclarar, que mis palabras hacia él no implicaban concordancia, sino mas bién se trató de reproches a su visión de la economía, siempre en un marco de respeto y cordialidad. Me puse en defensa de la intervención estatal y del proteccionismo del mercado interno, sobretodo en paises subdesarrollados.  Sin duda, que con 17 años y querer retrucarle a Cavallo sobre el fracaso de sus políticas, implicaba un grado de caradurez importante.  

En ese entonces creía que sabía más de lo que realmente sabía, aunque si me dieran a opinar ahora, no creo que se distanciaría demasiado con lo que escribí en el mail.


Aca les dejo el mail, y la posterior respuesta de Cavallo.

El 21 de agosto de 2008 20:46, xxxxxxx xxxx <xxxxxx@hotmail.com> escribió:
No tengo la garantía de que seas verdaderamente Domingo Cavallo, pero supondré que la pagina es suya y por ende el destinatario de este mensaje es efectivamente usted.

(...)
La decada del 90, de una manera sintetizada y poco academica, la divido en dos partes, la primera hasta 1996, mucho trabajo, capital, creditos, inversiones, tecnologia. Luego, "la fuga de capitales" establecimientos vacíos, las multinacionales absorbian todos los recursos y se iban, dejaban millones de desocupados, el negocio estaba hecho. Es infalible las consecuencias de un mercado demasiado abierto, en donde los MDC sacaban ventaja de los libre comercio de paises en desarrollo, abosrbian sus recursos.  A lo que voy, la decada del 90 fue como una alfombra, en cuanto sacaron la alfombra se presenció todos los desastres que habían hecho estas empresas, lo que desemboco evidentemente en la crisis del 2001, que parece dificil creer que se haya generado en un lapso menor a 2 años. Evidentemente fue una derivacion de un problema coyuntural de la Argentina, un problema que venia de varios años atras, durante el gobierno menemista.
Desde el punto de vista teorico (porque en la practica desconozco), un libre mercado perjudica a los paises como Argentian por ejemplo.  Un pais con una industria en pleno proceso de desarrollo, necesita de un gobierno un poco mas interventor, que proteja el domestic supply dado que las empresas multinacionales de paises europeos o de Estados Unidos, con costos increiblemente mas bajos, tecnologia de gran avanzada, y calidad inigualable suprime a todo aquel empresario nacional con intenciones de competir de igual a igual. Se hace imposible.  Se necesitan tarifas, cuotas embargos lo que sea, pero se necesita un Estado protector, proteccionismo al mercado interno, a la industria nacional.  Eso nos asegurara un crecimiento mas sustentable, y no un crecimiento de un horizonte demasiado cercano como ha sido el menemismo, en donde las vacas gordas fue solamente algo temporal.  La industria nos asegura este crecimiento, pero lo que es aun mucho mas importante, nos garantizara desarrollo que es lo que verdaderamente necesita el pais. Las importaciones era baratas, las exportaciones limitadas.  Es obvio que estos sistemas economicos son compatibles con los paises desarrollados, pero paises como Argentina, necesita, indefectiblemente, no de un estado maximo, pero si un poco mas intereventor con proteccionsimo interno, y regulación real de la privatizaciones del pais.  Solo basta, mirar a los industriales mejicanos como se vieron gravemente perjudicados por el NAFTA. Era imposible para ellos, lo unico que hacía Mejico era importar, su balanza de pagos iba en claro retroceso.
Con esto no defiendo el actual gobierno, puesto que no hay peor pecado que quitarle credibilidad a las estadisiticas e indices de un pais. Si había algún éxito, se vió desvanecido por un gobierno que se caracterizó por sus inverosímiles estadísticas.  Un gobierno que pierde la credibilidad es un gobierno que ha perdido la forma de gobernar.
Hace unos meses, estuve en contacto con Javier Gonzalez Fraga, luego de que él estuviera de visita en un debate político previa a las elecciones presidenciales, y me decia esto en relación al gobierno actual:

Solamente pienso que hay ciertos logros, com la reducción de la pobreza, el mejoramiento de la economía, y la recuperación "anímica nacional", que no deben estar ausentes en un balance más equilibrado de su gestión. Y esto es algo que algunos opositores, como Carrió, Macri y Lopez Murphy, no reconocieron, y se equivocaron, ya que fueron muy contrarios a esta política económica, no desde el 2006, como es mi caso, sino desde el 2002. Y en todos los casos, fueron defensores de la convertibilidad, que fue la gran causante de la crisis del 2001.

Quizas usted me pueda dar una vision un poco mas clara de lo que realmente sucedio en la decada del 90, por que estoy seguro que desde mi vision extremadamente general, y poco pragmatica debe de haber habido otras razones, y que seguramente enriquecerá mis conceptos economicos (...)

Respuesta de Cavallo

Estimado xxxxx,

(...)
 Si lees muchos de los artículos de mi sitio, desde 2002 para acá, verás mi opinión. Con relación al tema del proteccionismo, te recomiendo que comiences leyendo un artículo titulado "crecimiento empobrecedor" y uno mas reciente sobre "cómo recuperar la competitividad industrial".
Aunque es un poco más extenso y complejo, también te recomiendo un artículos que está en la página de artículos en español titulado "Régimen monetario y políticas cambiarias: lecciones de la experiencia argentina".
El proteccionismo industrial sólo sirve, por un tiempo limitado para desarrollar industrias en países muy grandes, con un gran mercado interno. Todos los países de nuestro tamaño que  lograron desarrollar su sector industrial lo hicieron abriéndose al mundo, porque eso les permitió responder el desafío de producir bienes de calidad suficiente como para conquistar mercados del exterior y tener costos menores, no por protección sino por alta eficiencia productiva. Las industrias que dependen de una alta protección al mercado interno, si ganan dinero lo hacen no por eficiencia sino porque terminan vendiendo a los consumidores locales bienes de inferior calidad que la que se producen en otros lugares y a precios más elevados que en los demás países. Esa en una forma de reducir el nivel de vida de quienes viven y trabajan en el país. La única forma de que las remuneraciones al trabajo puedan ir acercándose a la de los paísdes mas avanzados, es precisamente con aumentos de productividad, qu la experiencia demuestra que sólo se logran con competencia, interna y externa, reglas de juego estables y baja inflación y muy buena infraestructura y servicios de energía, comunicaciones y transportes. El proteccionismo exagerado no ayuda en este sentido.
Pero la discusión sobre proteccionismo o libre cambio tiene tanta historia como la historia de la economía política. Se inició con el libro que se considera el primer libro de economía. Fue escrito por Adam Smith en 1779 y se titula "La riqueza de las naciones", así que no te aflijas si aún no tenés respuestas claras a tus interrogantes. Las irás consiguiendo a medida que estudies la disciplina que elegiste.
(...)
Domingo Cavallo
(efectivamente soy yo, no dudes)